Doy gracias por todos los
deseos que pe(r)dí
y nunca se cumplieron,
también por todos los
tia, en serio, qué
estamos haciendo
que me grité en silencio
hasta marearme
y acabar de nuevo en sus
brazos.
Tal vez sea por el
humo de tu cigarro
pero quiero saber lo
que piensas de todo.
Si me dejases,
treparía entre tu
consciencia hasta trazar su mapa.
Tal vez sea la manera
en la que te tocas la barba
pero me encantaría
saber qué sienten tus dedos
cuando me acarician la
espalda.
pero me apetece muchísimo
besarte
hasta que las farolas
se apaguen
hasta que el cielo nos
dedique su espectáculo de luces
hasta que los primeros
paseantes del día nos miren mal
hasta que los
barrenderos nos manden a casa
hasta que vuelva a
temblar el suelo
hasta que llegue la
guerra
hasta que me muera.
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