Abre
paréntesis,
creo
que hay cosas que no entiendes.
Ahora
mismo podría escribirte un poema precioso,
leerte
entre líneas, mantenerme al margen
convertirme
en papel
de liar
y que
seas arte en lugar de fumar
en este
juego al que ninguno quería jugar
y ahora
míranos.
Quien
nos haya visto
no nos
va a volver a ver.
Ahora
mismo te haría polvo
como si
nunca hubieras existido
solo
para saber qué se siente.
Trabarme
entre tus letras,
encontrarme
en el quinto verso
tropezarme
y agarrarme a una coma
que se
te olvidó borrar.
Cierra
paréntesis,
ahora
lo entiendo todo.